Conferencia de Manuel Paniagua den el Centro Cultural San Hipólito
4/6/2012.- En el marco del ciclo de conferencia titulado ‘Conversaciones de la Biblioteca Loyola, ha tenido lugar recientemente la presentación del libro ‘Las empresas de la economía social. Más allá del comentario a la Ley 5/2011, de Economía Social’, de Manuel Paniagua, profesor de Derecho Mercantil en ETEA. Además de Manuel Paniagua, el acto contó con la participación de los profesores de ETEA José María Margenat y Alfonso Carlos Morales, y Juan Ignacio Font, de la facultad de Derecho de Córdoba.
El profesor Alfonso Carlos Morales destacó el carácter pionero del libro y la profundidad de las propuestas, advirtiendo que el concepto de economía social es una realidad en formación que convive con realidades como las empresas sociales o la economía solidaria, entre otras.
El profesor Juan Ignacio Font, prologuista de la monografía y maestro del autor, destacó la necesidad de esta forma de investigar, con rigor y con compromiso, y la necesidad de contrastar las empresas de economía social con las empresas capitalistas. Font recordó que tan constatable es que la empresa capitalista con forma anónima y limitada contribuyó al progreso económico y social cuando surgió en la Edad Moderna y se consolidó en el siglo XIX, como que hoy la gran empresa capitalista necesita ser moralizada, humanizada por su bien y el del conjunto de la sociedad y de nuestro sistema de economía social de mercado.
Por su parte, el profesor Manuel Paniagua centro su intervención en unas precisiones sobre los datos macroeconómicos de la economía social en España y los principios de la economía social: por ejemplo, la democracia económica o la limitación del fin lucrativo. Para Manuel Paniagua, las empresas de economía social “sirven a los intereses de sus socios o beneficiarios, por supuesto, pero también a los intereses generales, aportando externalidades positivas a la sociedad, pues hacen suyos unos costes sociales que suponen un ahorro de gastos y de inversiones para nuestras Administraciones públicas”.
En su opinión, el papel de las empresas de economía social es “convertirse en un poder compensador o equilibrador inspirado en valores alternativos que contribuya a mantener lo mejor de la empresa capitalista tradicional, como el impulso a la libertad y a la creatividad, y a enriquecer el conjunto del sistema económico con tareas y objetivos como la democratización y la humanización de la economía y sus empresas, el fomento del pluralismo empresarial, la mejora de la competencia económica y el fortalecimiento social y ético de la libertad para emprender en los mercados, en suma, una libertad para ser empresario con más contenido social y con más contenido ético.
Tras las intervenciones de los ponentes se abrió un animado debate donde surgieron preguntas, reflexiones y respuestas sobre las empresas éticas, el papel de las sociedades cooperativas dada la reciente promulgación de una nueva ley en Andalucía y la distancia entre la realidad (los hechos sociales) y la legalidad (las normas legales).
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